La intimidación es un comportamiento donde un grupo o un individuo intenta dañar, de manera repetida a alguien a quien perciben como más débil o con quien existe algún tipo de diferencial de poder en la relación .
Esta conducta puede ser manifestada de diferentes maneras:
· Ataques directos: golpes, insultos, o burlas.
· Ataques indirectos: difundir rumores o presionar a que otros rechacen a alguien.
Se estima que alrededor de 280,000 estudiantes de secundaria son atacados físicamente cada mes, y cerca de 160,000 estudiantes faltan a la escuela todos los días por temor a ser intimidados.
¿Cuál es el impacto de bullying?
Para algunos, el acoso escolar entre los niños es considerado como parte de una experiencia normal de crecimiento. Pero en realidad, la intimidación provoca un estado constante de estrés y temor. Puede tener un efecto duradero y permanente sobre la víctima, manifestándose en conductas de ansiedad, miedo, evasión, baja autoestima y poca concentración, así como bajas calificaciones escolares y aislamiento social.
En los adolescentes, los casos severos de acoso escolar puede llevarlos a sentir que necesitan tomar medidas drásticas: reaccionando violentamente para poder defenderse y/o considerar al suicidio como una solución.
¿Qué es el cyberbullying (acoso por el internet)?
El acoso cibernético es una manifestación mas moderna de “bullying” que se lleva acabo a través de la red virtual y, por lo mismo, puede ser mas difícil de detectar e identificar a los causantes. Esta forma de acoso incluye enviar correos electrónicos o mensajes instantáneos hirientes o amenazantes, difundir rumores a través de portales públicos o privados y/o publicar fotos embarazosas de otros en las redes sociales.
Los niños y adolescentes que son víctimas del acoso cibernético son más propensos a reportar problemas sociales y victimización interpersonal.
¿Cómo puedo hablar con mi hijo sobre el acoso escolar?
Es importante mantener una comunicación abierta en el hogar, estableciendo horarios cada día y creando espacios donde los padres escuchan activamente a sus niños y donde pueden observar cambios en el comportamiento, interés y/o bienestar emocional/psicológico de los mismos.
Cuando hable con sus hijos, discuta que la primera línea de defensa es ignorar al acosador. Tener un compañero o amigo para el niño acosado también es clave, ya que usualmente un acosador tiende a enfocarse en individuos solitarios.
No solo debemos de enfocarnos en fortalecer la comunicación con nuestros hijos, también es importante sustentar una línea de comunicación abierta con las escuelas, asegurándonos de que existan programas en pie para prevenir y responder a casos de acoso escolar.
¿Cómo sé si mi hijo está siendo intimidado?
Busque cambios en el comportamiento de su hijo o hija, tomando en cuenta de que no todos los niños acosados necesariamente exhiben señales o comportamientos de advertencia.
Algunos indicadores de que su hijo es víctima de acoso escolar son:
· Apariencia de moretones o lesiones inexplicables
· Perdida o destrucción de pertenencias como ropa, libros, electrónicos o joyas.
· Dolores de cabeza o dolores de estómago frecuentes, sentirse enfermo o simular una enfermedad.
· Cambios en los hábitos alimenticios como falta de apetito o comer en exceso (Los niños pueden volver de la escuela con hambre porque no han almorzado).
· Dificultad para dormir o pesadillas frecuentes.
· Disminución de calificaciones, pérdida de interés en el trabajo escolar o no querer ir a la escuela
· Pérdida de amigos o evasión de situaciones sociales.
· Sentimientos de impotencia o disminución del autoestima.
· Comportamientos autodestructivos como huir de casa, hacerse daño o hablar de suicidio.
¿Cuándo debería hablar con la escuela? ¿Cómo hablo con la escuela?
Siéntase con la libertad de comunicarse con la escuela cuando tenga cualquier inquietud sobre las burlas comportamiento de intimidación que observe sobre sus hijos o cualquier otro alumno y compañero. Busque hablar específicamente con el maestro, el consejero y/o el director.
Todos los estados en Estados Unidos han promulgado y pasado leyes contra el acoso escolar. También existen intervenciones conductuales y de apoyo positivo, así como programas de aprendizaje socio-emocional que pueden ser implementados en las escuelas.
En las escuelas que tienen un programa anti-bullying, el bullying se ha reducido por 50%.
¿Cómo obtengo ayuda para mi hijo?
Si usted cree que su hijo o hija puede ser víctima de acoso escolar, lo primero que debe hacer es comunicarse con la escuela y reunirse con el maestro para evaluar cómo se puede detener la intimidación. En caso de que usted sienta que el acoso este afectando el estado de ánimo, la autoestima o el funcionamiento emocional/conductual de su hijo, es importante consultar con un médico o psicólogo para asegurarse de que su hijo o hija tengan acceso a todas las herramientas disponibles para sobrellevar los efectos físicos y psicológicos de la intimidación.
Lo invitamos a que visite StopBullyingNowFoundation.org para más información. “On Call for All Kids” es una serie semanal con expertos médicos de Johns Hopkins All Children’s Hospital. Visite HopkinsAllChildrens.org/Stories cada lunes para obtener el último informe.
Este informe ha sido escrito y publicado por: https://www.hopkinsallchildrens.org/ACH-News/General-News/How-to-Talk-to-your-Child-about-Bullying
Traducido por Stephanie Perez, B.S, Pipeline Coordinator y Joanna Kuttothara, M.D, sr. Research Program Coordinator
